Carlos Montemayor, poeta, tenor y promotor de las letras indígenas piensa donar sus archivos

Carlos Montemayor, autor
de varias obras como
"Las armas del alba"
Foto: Internet

Ciudad de México, 21 de Septiembre de 2006.- El escritor, poeta, tenor y promotor de las letras indígenas Carlos Montemayor informó la víspera que tiene pensado donar los archivos que le han permitido escribir sus obras, entre ellas las reconocidas novelas "Guerra en el paraíso" y "Las armas del alba".

Al participar en el ciclo "Los escritores y sus lecturas", el autor chihuahuense explicó que para armar sus escritos ha hecho investigación histórica, trabajo de campo y entrevistas a primeras fuentes, todo lo cual piensa entregar pronto a la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez.

En el Centro de Lectura Condesa, en esta ciudad, explicó que de sus investigaciones de campo ha surgido un numeroso archivo de grabaciones con decenas de conversaciones.

Integrante de la Academia Mexicana de la Lengua, de la Real Academia Española y de la Asociación de Escritores en Lenguas Indígenas, Montemayor consideró que sus novelas no son históricas, contrario a lo que piensan sus editores.

Aclaró que para él una obra de ese tipo es la que desarrolla un autor a partir de una historiografía previamente publicada, con base en la cual reconstruye, impugna, corrige, apoya o matiza.

En tanto, "yo he trabajado mucha la historia oral, gran parte de lo que yo he escrito en mis novelas está hecho con investigación de campo, en mi caso mis novelas no se apoyan en ninguna historiografía previa porque antes de estas novelas no había otras", aseguró.

Lo anterior significa que "mis propias novelas son la primera formulación historiográfica y la primera formulación literaria" de un hecho concreto, manifestó.

Subrayó que su investigación ha sido de campo, la inicial que debió hacer un grupo previamente, por lo que no se tratan de novelas históricas, pues aunque tienen investigación documental y bibliográfica son, sobre todo, producto de la indagación directa.

Apuntó que hacer esas conversaciones implica un trabajo muy exhaustivo de testimonio oral, que conforma un archivo de muchas horas de grabaciones orales, y que sin embargo al llevarlas a las novelas adquieren valor literario y ya no tienen nada que ver con su origen.

"Cuando leemos una conversación de una novela o de un cuento y nos convence, si estamos seguros de que eso es una conversación estamos equivocados porque eso no es una conversación es una creación literaria", dijo.

Señaló que del amplio número "que tengo de conversación ninguna puede parecer transcrita automática como una conversación literaria, donde uno sienta que está conversando".

Montemayor destacó que hay autores que logran escribir como si conversarán, como Montaigne, Séneca o Juan José Arreola, en México, quien fue un genio de la plática y la escritura en novelas, como es el caso de "La feria", que es "una conversación perfecta".

También algunos textos de los mexicanos Agustín Yáñez y Juan Rulfo son como conversaciones, sin embargo, no es nada sencillo hacerlo, a pesar de que ha trabajado mucho y entrevistado a decenas de personas para conformar los archivos orales que han dado origen a sus novelas.

"De manera que escribir como si fuera una conversación significa proponerse crear verbalmente, artísticamente, una narración que parezca conversación. En la literatura también es necesario que cada personaje tenga su propio sello de dicción para que el lector sienta que ese personaje está conversando", acotó.

Asimismo, Carlos Montemayor anotó que su interés por las lenguas indígenas comenzó en 1979-80, cuando le pidieron que revisará una antología de cuentistas oaxaqueños, y fue tan determinante que no ha podido despegarse nunca jamás del estudio y difusión de ellas, tal como lo cuenta en el libro "Encuentros en Oaxaca".

El escritor nacido en Chihuahua en 1947, que también ha escrito poemarios como "Las armas del viento", "Abril y otros poemas" y "Memoria de verano", afirmó por último que la formula para leer buena literatura es acercarse a las historias que gusten y atraigan sin importar cuál sea el tema. (Notimex)

Leave a Reply