El detonador de este texto infantil —editado por el FCE, 67pp—, señala el autor, “es la dedicatoria que hace Saint-Exupéry en su libro El principito a León, donde escribe que él es su mejor amigo del mundo”.
Muchas preguntas nacen de esa frase y traté de darles respuesta, añade Antonio Malpica. “Investigué para saber quién era León Werth y, de esta forma, supe cómo se conocieron él y Antoine de Saint-Exupéry. El texto no es la historia del escritor francés, sino la historia de una amistad a prueba de todo”.
Del cuento, añade, quise mostrar a los niños dos aspectos fundamentales de la amistad: uno, es que Tonio –-Saint-Exupéry— y León, aunque son totalmente diferentes y el segundo le lleva muchos años de edad, logran establecer un lazo que supera las distancias, el tiempo y las adversidades.
“Porque la amistad no necesariamente es por intereses afines. Se puede ser mejor amigo de una persona que le va a las Chivas y otro al América, o se tiene una diferencia de edad de 15 años”, agrega.
Otro punto, explica, es que el amigo no necesariamente es con quien te sientas en la banca de la escuela, que están siempre juntos y van a muchos lugares. “Te das cuenta que eres amigo de alguien y sí no lo ves en 15 años, sigue siendo el mismo: el que te ayuda cuando te sientes solo y te acompaña. Esos son los dos aspectos de la amistad de Tonio y León que quise recuperar”.
Pero alerta que hoy, con las redes sociales: Facebook y Twitter, puedes tener 500 amigos pero se trata de que alguien te acompañe y muchos dirán que sí, pero ningún irá. “Se han vuelto números y han devaluado la palabra amigo”.
Fuente: (cronica.com.mx/Adrian Figueroa)
