Culiacán, Mazatlán y Los Mochis, Sinaloa, del 29 de abril al 8 de mayo.
Héctor Chávez Fierro, fundador del festival, explicó en entrevista que celebrar la 25 edición del Festival es hablar de un esfuerzo previo de 10 años de arduo trabajo, intensa difusión y aportaciones económicas del Instituto Sinaloense de Cultura, el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, a través del Instituto Nacional de Bellas Artes, los ayuntamientos de Culiacán, Mazatlán y los Mochis, así como el apoyo de la iniciativa privada.
Este apoyo interinstitucional año con año le dan fuerza y trascendencia internacional al espectáculo que en esta ocasión es respaldado con un millón y medio de pesos, 50 por ciento más que en años pasados por tratarse de una edición especial de aniversario.
Al hacer un balance, el también director artístico señaló que a raíz de la fundación del festival surgieron varios grupos, dos escuelas, y se crearon dos licenciaturas en danza contemporánea, además de que en la región se incrementó la actividad de danza. “Sinaloa ya es una referencia para la danza contemporánea y más aún porque aquí nació el bailarín José Limón.”
Héctor Chávez Fierro expuso que ha dado resultados acercase a las nuevas generaciones teniendo como un icono, un ejemplo a seguir a José Limón. “Fue un personaje que a pesar de estar lejos de su país en un tiempo donde había mucha discriminación racial, luchó contra una cultura que no le pertenecía y salió avante, es un ejemplo a seguir que se transmite siempre que se habla de danza.”
La selección de los grupos participantes —señaló Chávez Fierro— se ajusta al perfil de un festival que reúne tanto obras coreográficas apegadas o cercanas al estilo Limón, como a las corrientes actuales de la danza y las manifestaciones etno dancísticas auténticas.
Otro aspecto destacable del festival es la entrega de premios y reconocimientos: el Premio Nacional de Danza José Limón se otorga a todos los artistas, grupos, compañías e instituciones mexicanas o extranjeras, cuya labor profesional significa una aportación de gran trascendencia para la danza moderna y contemporánea en el país, ya sea como creadores o intérpretes.
En esta ocasión el premio será otorgado a la maestra Cecilia Lugo, directora de la Compañía Contempodanza, que este año celebra también 25 años de trayectoria y la cual presentará una coreografía preparada para el pasado Festival Internacional Cervantino, Memoria de Soles. El premio está dotado de 40 mil pesos y diploma.
El evento inaugural correrá a cargo de la Compañía de Danza José Limón de Nueva York, acompañada de la Orquesta Sinfónica Sinaloa de las Artes, esta función se realizará en el Teatro Pablo de Villavicencio a las 20:00 horas el viernes 29 de abril.
“El traer a la José Limón Dance Company —explica Héctor Chávez— representó un esfuerzo extraordinario porque estamos hablando de 23 integrantes, una gran inversión que bien vale la pena porque además la compañía está cumpliendo 65 años de su fundación.”
En el acto inaugural estarán presentes la directora ejecutiva de la Fundación José Limón de Nueva York, Gabriela Poler-Buzali, para entregar una placa conmemorativa para este festival, acto al cual se espera la presencia del gobernador Mario López Valdez.
En esta función, la José Limón Company presentará la obra El emperador Jones, con música de Heitor Villa-Lobos, que no había montado desde hace 25 años. La pieza se presentará además en Mazatlán el 1 de mayo.
Con el apoyo de Iberescena, participarán tres compañías españolas: Sol Picó, la mejor bailarina de España con la música rock en vivo, en un espectáculo impactante; ella se presentará el lunes 2 de mayo en Culiacán; la Compañía Provisional Danza se presenta junto con la Compañía Danza Joven del ISIC, el viernes 29 en Los Mochis y el 1 de mayo en Culiacán, el 4 de mayo en Mazatlán, con el espectáculo conjunto Ni ogros ni princesas.
En tanto, la Escuela Profesional de Danza de Mazatlán, hará acto de presencia con una obra de estreno, mientras que la Escuela Superior de Danza del ISIC muestra un programa didáctico y la obra Deliciosos con 16 bailarines varones en escena, algo inédito en la danza sinaloense.
Así es como esta gran fiesta del arte del cuerpo en movimiento, da cabida no sólo a grupos de danza contemporánea, sino a todos aquellos artistas de la danza o relacionados con ella que tengan una propuesta actual y vigente vinculada a los valores fundamentales del ser humano.
“Nuestro propósito para los subsecuentes festivales es hacer crecer más el entusiasmo y la participación, no sólo en estas tres ciudades principales, sino en Guamúchil y Guasave, entre otros sitios, que en anteriores ocasiones ya habíamos llegado y por cuestiones presupuestales se dejó a un lado, ahora con el apoyo de la nueva administración se va a retomar, la idea es prosperar”, precisó el director del festival.
Fuente: (CONACULTA)
